70 años de los Derechos político-electorales de las mujeres

Dentro del marco de la próxima celebración de los 70 años en que se le abrió el campo político a la mujer, reconociéndole el voto a partir del mes de agosto de 1953, se está invitando a las mujeres nayaritas que hayan ocupado un cargo en alguno o todos los Poderes de la Unión, tanto a nivel municipal, estatal como federal, a participar en esta celebración que llevará el título de “70 años de los Derechos Políticos Electorales de las Mujeres”, respondiendo a la pregunta: ¿Cuáles son las experiencias más significativas en el ejercicio de tu cargo?

La invitación se está haciendo bajo la supervisión de la doctora, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma de Nayarit, Lourdes Pacheco Ladrón de Guevara. El testimonio de la experiencia más significativa que hayan tenido o tengan las mujeres nayaritas al ocupar un cargo político o de funcionaria, será publicado en un libro de próxima aparición en donde se expondrá lo que ha significado para el país la participación de las mujeres en el servicio público.

Una de las mujeres nayaritas que ha levantado la mano para dar a conocer su testimonio como servidora pública, es la licenciada Ana María Ibarra Tovar, quien ocupó la diputación local por el 9° Distrito que, en ese entonces abarcaba los municipios de San Blas y Xalisco, Nayarit, en la XX Legislatura que comprendió de 1981 a 1984 y, por lo mismo, fue diputada presidenta de esa legislatura durante un mes, por lo que le correspondió contestar el último informe de gobierno del entonces gobernador Rogelio Flores Curiel (1976-1981).

La entonces jovencita Ana María Ibarra Tovar, prácticamente se vio involucrada en la política nayarita desde la temprana edad de 15 años, cuando llegaron a la academia donde estudiaba taquimecanografía, unas personas de Acción Electoral del PRI, dentro del gobierno del entonces gobernador de Nayarit, doctor don Julián Gascón Mercado (1963-1969), buscando a las alumnas más adelantadas y que ya estuvieran por culminar sus estudios de esta materia, para llevarlas a mecanografiar las credenciales de los militantes del partido, así como otros menesteres que necesitaban ser mecanografiados.

Ibarra Tovar continuó ya trabajando en la burocracia estatal cubriendo interinatos en puestos que por ingravidez tenían que incapacitarse las mueres en diversos puestos. A la par entró a estudiar a la Normal Superior del Estado, de donde estudio la cátedra de la materia de Historia y a la vez, también después de la escuela preparatoria ingresó a la facultad de Derecho. Fue en el sexenio del entonces gobernador del estado, Roberto Gómez Reyes (1970-1975), cuando Ibarra Tovar obtuvo su base-plaza, por lo que se afilió al Sindicato Único de Trabajadores al servicio del Estado y Municipios (SUTSEM), siendo su entonces dirigente el señor Ramón Estrada Ocampo (1966-1975).

Dentro de las filas del PRI, ocupó el cargo de secretaria General de la Asociación Nacional Femenina Revolucionaria (ANFR), asociación que, con el tiempo, ha cambiado a denominarse de diversos modos, aunque ahora tiene un perfil muy bajo.

Ana María Ibarra Tovar adquirió mucha experiencia y conocimientos gracias a que estuvo al lado de grandes políticos nayaritas como don José Félix Torres Haro y otros; pero con quién aprendió mucho sobre política fue con don Emilio Manuel González Parra, desde mucho antes de que se vislumbrara que llegaría a ser gobernador de Nayarit de 1981 a 1987. Con don Emilio, Ana María, junto con un equipo de trabajo recorrió varias veces el estado de Nayarit, por lo que gracias a ello pudo conocer muchas localidades desconocidas para ella en muchos aspectos, conoció y supo cómo viven las diversas etnias del estado, sus usos y costumbres, así como se maneja la política en otras zonas.

Ana María Ibarra ocupó el cargo de dirigente del SUTSEM de 1978 a 1981 y, si bien tuvo la oportunidad de reelegirse, no aceptó, porque sentía que durante su dirigencia había cumplido cabalmente con sus representados, pues no fue dirigente de escritorio, sino de campo, visitando a los trabajadores en las calles, parques, jardines y en todos los lugares en donde estaban trabajadores afiliados al SUTSEM, para recibir quejas y sugerencias en forma personal y, además, porque ya estaba en puerta su candidatura para la diputación local, logrando el triunfo para ocupar una curul en el Congreso Estatal.

Ana María se jubiló como maestra catedrática, y ahora ocupa el cargo de presidenta del Foro Cultural de Arte y Cultura Ofelia Domínguez Jiménez.

Sea pues. Vale.