Contra narcotráfico, lucha que no termina

El General Brigadier Miguel Andrade Cisneros, quien fuera comandante de la Treceava Zona Militar, con asiento en Tepic, se mostró cauto al comentar la aprobación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre el uso y siembra de mariguana para consumo personal.

Algunos consideran positiva la medida, otros negativa. Las fuerzas armadas seremos respetuosos de los ordenamientos, pero además acataremos lo que sobre el particular determinen las autoridades civiles, dijo el mílite.

En 1976, como oficial recién egresado del Colegio Militar al hoy General le correspondió encabezar operativos militares contra el cultivo de marihuana, de inicio en La Piedad, Michoacán, y enseguida en el valle conocido como Tierra Caliente: Tepalcapetec, Arteaga, Apatzingan, Buenavista y Parácuaro, entre otros.

Tiempo después al General Miguel Andrade tocó en turno abatir el cultivo de enervantes y el narcotráfico desde Chihuahua en la zona del triángulo dorado, comprendido además por los estados de Sinaloa y Durango. Es decir, su incursión ha sido en la mera mata del narco en el país.

Cuando el General Miguel Andrade asumió la comandancia de la treceava zona militar, desde entonces, asegura, emprendieron acciones militares de localización y destrucción de plantíos de amapola y marihuana en Nayarit.

Dio a saber que se destruyeron 255 plantíos de marihuana que hacen una extensión de 30 hectáreas. Se localizaron en el municipio Del Nayar, en poblados como Mesa del Nayar y San Rafael que colinda con Durango.

Por lo que respecta a plantíos de amapola, fueron 26 los destruidos por el ejército en nuestra entidad. “Esta es una lucha que no termina”, consciente lo manifestó el General Andrade. 

La tropa continúa con la serie de reconocimientos, vía aérea y terrestre, con el uso de tecnología moderna como GPS que facilita la ubicación, por lo tanto, el trabajo es más eficaz.

El general brigadier Miguel Andrade Cisneros nació en Tezoatlán de Segura Luna, Oaxaca, en el seno de una familia de clase media. Su madre estudió en un colegio de monjas donde adquirió conocimientos que la ubicaron en posición sobresaliente en relación al término medio. 

Después de terminar la secundaria, él tuvo necesidad de ir a la ciudad de México para cursar estudios de Preparatoria. Hizo examen en la 4, pero no matriculó porque la escuela se fue al paro, era la consecuencia del movimiento estudiantil de 1968, una vez ocurrida la matanza del 2 de octubre en Tlatelolco.

Es en esa coyuntura cuando ingresa al Colegio Militar, de lo cual se siente complacido por la dificultad que en ese tiempo presentaba entrar a esa destacada institución.

“Encontré un medio que me formó como buen ciudadano, buen profesionista, que a lo largo de mi vida me ha permitido ser una persona útil a la sociedad. De haber estudiado en el Colegio Militar me siento muy orgulloso”, sostiene el ahora General Brigadier.

Fue destinado al Estado Mayor Presidencial en los sexenios de los presidentes Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo.

Para cumplir encomienda del ejército, el General Miguel Andrade vino por primera vez a Nayarit en 1985, siendo gobernador don Emilio M. González, recuerda con mucho agrado.

Cuarenta y siete años de carrera militar le permiten manifestar que como todos los mexicanos admira mucho a Benito Juárez.