Un hampón llamado Pedro Haces
Ulises Rodríguez
12 de Mayo de 2023
Como si de una mala broma se tratara, esta tarde le senador por MORENA y secretario general de la Central Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), eligió a Nayarit como el espacio idóneo para presentar su libro “Breve crónica del sindicalismo en México”. Sí, el estado cuyo gobierno le ha declarado a la clase trabajadora a través de la persecución de unos sindicatos y la cooptación de otros. Lo anterior por sí sólo ya sería grave, pues es uno de esos casos de incongruencia en los que uno ya no sabe si indignarse o mejor echarse a reír para no llorar. Sin embargo, esto se agrava cuando analizamos al personaje al que hoy la clase política local le rindió servil pleitesía.
Se trata, como ya dije, del secretario general de la organización que sustituyó a la otrora poderosa CTM de los tiempos del PRI y que, en el actual régimen, hace las veces de un Fidel Velázquez moderno. Personajes como Manuel Velasco, Javier y César Duarte se referían a él como “padrino” y su poder, desde hace algún tiempo, radicaba en sus relaciones políticas y en su poder económico como Bróker en el auxilio de políticos para desviar recursos públicos. Durante años, como propietario de la empresa Servicios Integrales de Seguridad, Limpieza y Mantenimiento S.A de C.V, operó negocios irregulares con gobiernos priistas. De lo anterior, basten dos ejemplos:
Una llamada telefónica entre el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte y su asesor, el también ex gobernador de Oaxaca, José Murat. La llamada realizada en mayo del 2016 y dada a conocer por diversos medios nacionales, revela que Duarte debía 30 millones de pesos a Pedro Haces, mismos que presuntamente le pagó con un desvío de recursos del seguro popular.
También en el Veracruz de Javidú, se demostró con documentos oficiales expuestos en su momento por NOTIMEX que Pedro Haces obtuvo al menos 493 millones 721 mil 422 pesos en contratos irregulares de prestación de servicios.
Cito a continuación, lo publicado por Notimex al respecto:
“Aunque el objeto del convenio es el mismo: “Contratación del servicio subrogado de limpieza a oficinas centrales, jurisdicciones sanitarias, hospitales y centros de Salud de Veracruz”, los montos de los contratos varían entre 81 millones 781 mil pesos, y 168 millones 173 mil 43 pesos.
El primer contrato, Número 005, firmado el 10 de abril de 2015, fue adjudicado de manera directa “por excepción de ley” y es por un total de 81 millones 781 mil pesos.
El origen del recurso presenta varias partidas, entre las que se encuentra el Seguro Popular, de donde salieron 51 millones 390 mil 412 pesos para pagar el contrato con la compañía de Haces Barba, el cual se acordó tendría con una vigencia del 1 de enero al 30 de abril de 2015.
Quien firma por la empresa “Seglim” de Haces Barba, es el representante legal de la misma, Benjamín Fernando Grajales Jiménez, un banderillero de toros retirado y amigo personal del líder sindical, que es fanático y empresario de la fiesta brava.
El segundo contrato es el Número 082, firmado el 28 de julio de 2015, y aunque el objeto es el mismo del primer contrato, fue asignado en licitación pública nacional, quizás por el monto que duplica al primero, que fue adjudicado directamente.
Este segundo contrato con las autoridades de Veracruz es por 159 millones 809 mil 395 pesos y nuevamente la mayor parte de los recursos procede de la partida del Seguro Popular.
De esa partida salieron 106 millones 144 mil 469 pesos para pagar a la empresa de Haces Barba. El contrato tuvo una vigencia del 1 de mayo al 31 de diciembre de 2015.
El tercer contrato es el Número 021 y fue asignado por adjudicación directa a la empresa “Seglim” del líder sindical, por un monto de 83 millones 957 mil 980 pesos. El servicio tiene una vigencia del 1 de enero al 30 de abril de 2016.
El cuarto contrato con el gobierno de Duarte Ochoa es el Número 041 y fue asignado en una licitación pública nacional por un total de 168 millones 173 mil 43 pesos.
Aunque fue firmado el 6 de mayo, su vigencia inició con fecha anterior a la firma del contrato. El servicio debió efectuarse del 1 de mayo al 31 de diciembre de 2016.
Es decir, fue asignado en una licitación pública nacional, pero se firmó cinco días después de la fecha en la que la empresa ganadora debió iniciar sus trabajos”. Hasta aquí la cita y anexo los documentos probatorios.
Y es que, Haces Barba, que fue electo senador como suplente de Germán Martínez y que asumió el cargo durante el periodo en que el ex dirigente nacional del PAN fungió como Director General del IMSS, es un personaje folclórico que bien podría encajar en el estereotipo de líder sindical charro del siglo pasado. Afiliado al PRI desde el 29 de junio de 1981, sólo cambió su militancia partidista cuando Andrés Manuel López Obrador era ya presidente electo de México. Operador político y financiero no de MORENA, sino de los políticos que allí se agruparon para mantener su poder y que fueron bien acogidos pues no llegaron con las manos vacías, entre los que se encuentran perfiles del PRI y del PAN, Haces Barba goza hoy de un poder sin contrapesos.
No sólo aficionado a la fiesta brava, sino empresario de esta, el dirigente nacional de la CATEM es también aficionado a las armas y su misoginia es bien conocida. Por ejemplo, en marzo de 1998, fue detenido por robo de auto con violencia y portación de arma de fuego, en el entonces Distrito Federal. y sus comentarios misóginos están tan bien documentados como sus actos de corrupción.
La más emblemática es aquella en la que señaló durante una entrevista de radio en 2019, que “También hay que tener obligaciones las mujeres en el sentido de la vestimenta, tienen que ser un poco más provocativas en el área de trabajo. La mujer muchas veces provoca y entonces después no aguanta La misoginia de Haces Barba no impidió, por cierto, el aplauso de las legisladoras de MORENA y sus aliados, que en el discurso defienden a las mujeres, pero que parecen no tener empacho en aplaudir a personajes como Pedro Haces Barba.
La presentación del libro se tornó en un festín. Las actividades en el Congreso fueron suspendidas para recibir al invitado como se merecía, con bombo y platillo. El gobernador Navarro Quintero, habló como si fuera un estadista que no tiene sobre su conciencia el daño a miles de familias de los trabajadores en el estado, mientras el dirigente sindical, otrora robacoches sonreía complacido.
-Fueron buena inversión las campañas del 2017 y 2021- seguramente debió pensar al ver a su amigo en el atril como gobernador. Lo que hay que ver.
Comentarios