En el desmesurado mercadeo electoral que asedia a los partidos políticos a consecuencia de que cientos de sus militantes se han inscrito como aspirantes a las candidaturas a presidentes municipales, síndicos, regidores de mayoría y diputados que compiten por que creen tener merecimientos partidistas personales o el apoyo de amigos o compadres de los jefes políticos de esas instituciones, ahora andan hechos bolas, desconcertados, algunos hasta irritados porque no saben a ciencia cierta si realmente serán las encuestas las que determinarán finalmente quienes serán los candidatos oficiales de sus respectivos partidos.
Esta incertidumbre no es nada casual. Ha sido una vieja práctica política la opacidad en sus procesos de elección interna. Esta actitud la pudimos corroborar en el tricolor por la voz de dos de sus precandidatos a gobernador del Estado, Raúl Mejía González y Gerardo Montenegro Ibarra. En ese mismo tenor lo hizo el precandidato a la alcaldía de Tepic, Julio Mondragón.
Por tales razones los precandidatos priistas a los distintos puestos de elección popular ya no saben a qué atenerse. De allí que decenas de ellos se han retirado de la contienda, otros aún tienen fe en que no habrá dados marcados; y otros, ya tienden puentes a los partidos políticos de oposición PRD y PAN.
Por esta misma razón este lunes inusitadamente fue dado a conocer a la opinión pública una carta abierta del senador con licencia Gerardo Montenegro Ibarra, el que sin tapujos denunció que por considerar que el jefe del Poder Ejecutivo pretende imponer candidaturas, renunciaba a sus aspiraciones por la alcaldía de Tepic. Por supuesto esta denuncia pública deja fuera de la competencia electoral interna a la corriente magisterial.
Esto explicaría el por qué la semana pasada un hombre de gran talento político como lo es Pablo Montoya de la Rosa optó por retirarse de la contienda interna a la presidencia municipal de nuestra capital. No entendemos cuál fue el pecado capital de este profesionista para ser desterrado de la llamada "Ola Roja" cuando 6 años antes era uno de los más cercanos colaboradores de Ney González. Se comenta entre bastidores que el Partido Acción Nacional le está abriendo sus puertas. No creemos viable porque uno de los más fuertes aspirantes a ese puesto es el licenciado Juan Echegaray, persona muy cercana al Dr. Miguel Ángel Navarro Quintero.
Vaya que el PRI enfrenta en su interior una grave división interna.
EL QUE VA VIENTO EN POPA ES NADA MENOS QUE NUESTRO COLEGA LENIN GUARDADO NEGRETE, el que se postuló como precandidato del PRI a una regiduría por la demarcación 7 que comprende la reserva territorial Los Sauces, La Cantera y otras pequeñas colonias aledañas. Nuestro compañero periodista tiene el apoyo de varias organizaciones periodísticas, la Federación de Abogados y la simpatía de los habitantes de esa zona territorial en donde ha vivido por más de 25 años. Este arraigo seguramente le garantizará finalmente el triunfo sobre sus 6 competidores.