La UCAN y la conmemoración de la libertad de expresión

La Unión de Columnistas y Articulistas de Nayarit (UCAN), bajo la coordinación general del conocido periodista Ezequiel Parra Altamirano, consumó su testimonio y participación este sábado 11 de junio en la conmemoración del aniversario número 71, del "Día de la libertad de expresión" en México, que cada siete de junio desde el año de 1951 -a iniciativa de los editores de diarios y la respuesta fecunda del entonces Gobierno de la República encabezado por el Presidente Miguel Alemán Valdés-, se convoca a los artífices de la noble labor periodística, a la reflexión tocante de su invaluable misión y objetivos, de cara a los retos democráticos vigentes, y de su impacto en el desenvolvimiento de la dinámica social.

El encuentro de los columnistas, comunicadores y generadores de opinión de la UCAN, sirvió de base en esta ocasión, para compartir el oportuno enfoque ideológico del también experimentado periodista, Maestro en Derecho y Catedrático de la UNAM, Eduardo Sadot, y la aguda visión político-gubernamental como cronológica de la evolución democrática de la Entidad, del ex Mandatario nayarita (1987-1993), Celso Humberto Delgado Ramírez, coincidentes en la valía sobresaliente que reviste el esfuerzo de “ejercer y defender la libertad de expresión”, en los actuales días, donde si bien no comportan el mejor momento para el periodismo mexicano en términos de las garantías constitucionales del respeto a su integridad física y a su labor, no dejan de ofrecer elementos singulares para potencializar al máximo el compromiso, la responsabilidad y vocación de los aguerridos profesionales de la comunicación y del subsecuente quehacer analítico, tan necesarios en la inacabada lucha por una sociedad debidamente formada e informada.
De conformidad, Eduardo Sadot afirmó que en el presente entorno magro de violencia y muerte para el ejercicio valiente de los periodistas de vanguardia, no hay festejo alguno, sino la conmemoración que reconoce el aporte de cada uno de los homólogos caídos y de los que no cejan en su apuesta valiente por un presente de vigencia absoluta del Estado de Derecho, de libertades, de una fluida comunicación pueblo, autoridad y sectores, de frente a su vez, a un futuro de paz, desarrollo armónico y libertad.

Así, haciendo eco de la milenaria filosofía china, el columnista Sadot, precisó que el periodismo mexicano, y en este caso, nayarita, posee en sus manos la vía para hacer de la crisis, una oportunidad histórica y dejar un legado de justicia, y de inalienable ejercicio y defensa pues, de la libertad de expresión.

El ex Gobernador, Celso Delgado, en su oportunidad, secundó a Sadot y dejó en claro que la historia de Nayarit, solo es posible conocerla a cabalidad y entenderla en todos sus matices, desde el sutil enfoque que recrea el sentimiento social (cultura e identidad) y la consecuente reseña del diario acontecer, vertidos en el poderoso ingenio y creatividad de la obra periodística, por cuanto es objetiva, veraz y oportuna, de tal suerte que instó a leer el trabajo de los periodistas nayaritas, a tomar un espacio para el deleite de la crítica, no pocas veces cargada de una dosis mayor de buen humor y de una peculiar descripción que devela pasado, presente y futuro, lo mismo que desafíos e intereses, de los personajes que han dado y seguirán configurando la escena política, económica y social de la localidad, y del plano nacional.

Mientras tanto, para el Coordinador General de la UCAN, Ezequiel Parra, la misión de los compañeros de lucha diaria que representa, es sin duda factor común con el resto de los comprometidos soldados de la comunicación nayaritas, que con lealtad e inobjetables principios de justicia, legalidad, de veracidad y objetividad, efectúan y lo seguirán haciendo, una labor coadyuvante a la construcción de las mejores condiciones democráticas, porque no hay duda, dijo, que "en el registro y análisis del acontecer y del aporte de quienes han hecho y dado forma a la historia, radica el ejercicio de la libertad de expresión". 

Es pues, el actual, un tiempo oportuno para concentrar esfuerzos en el entendimiento de tiempo, circunstancias y posibilidades reales como estrategia mancomunada pueblo-gobierno y, en esta coyuntura, los profesionales de la interacción periodística, en aras de erigir el blindaje preciso de frente a los ingentes desafíos del indómito porvenir. Todo ha cambiado, y nada volverá a ser igual, y un elemento imprescindible en la decodificación de las señales del devenir, está en la comunicación. De tal suerte que en el “ejercicio y defensa de la libertad de expresión”, y su respaldo institucional inteligente -en las líneas de acción que sumen, atiendan y coordinen con precisión y certeza- se encuentra el camino que facilitará diagnósticos fidedignos del sentimiento colectivo y su consecuente evolución. ¿Se logrará? Sigamos atentos a la trama.