La justicia es la causa común, el diálogo, la vía del ‘cómo’ en la unidad que reconstruye

“Adolfo Ruiz Cortines, concebía su trabajo como el de un buen administrador: poner orden, cuantificar necesidades, establecer prioridades, delegar en personas competentes, llevar seguimiento del proceso, verificar resultados”.-Enrique Krauze (La presidencia imperial).

Con la reciente firma del “Decreto Administrativo que reforma su similar que declara Reserva de Conservación, Equilibrio Ecológico y Regeneración del Medio Ambiente bajo la categoría de Área Natural Protegida, Reserva Biósfera Estatal Sierra de San Juan”, se conformó este fin de semana una singular alianza entre poderes y órdenes de gobierno de Nayarit, para consumar justicia cabal por el medio ambiente, según se dio a conocer, a efecto de frenar con firmeza cualquier acto ya de explotación inmoderada del citado ecosistema, la que no ha parado pese a la prohibición y los acuerdos tomados, luego de la extracción de material pétreo que durante décadas -y fuera de toda normativa legal- lo ha devastado; y sirvió de base, cabe decir, para hacer extensiva esta cruzada por “la justicia, la legalidad y el bienestar social”, a otros campos, como el del urgente orden financiero -ante la gris herencia vigente- y el consecuente equilibrio presupuestal que buscaría dar sustento equitativo a la recién aprobada Ley de Derechos y Justicia Laboral, motivo de una creciente polémica e inquietud entre el sindicalismo local.

El evento, que fue encabezado por el Gobernador del Estado, Miguel Ángel Navarro Quintero, fue marco ideal para dejar en claro que tal como es tarea impostergable de autoridades, sectores involucrados y pueblo en general atender y restaurar al máximo los lamentables socavones del Cerro de San Juan, también lo es el subsanar el impacto del terrible socavón financiero que pervive como saldo de los ejercicios antecesores, motivo por el cual llegó el momento de integrar esa gran fuerza que hará posible transformar a fondo el Estado, haciendo garante los beneficios de la justicia y el desarrollo para toda la sociedad.

Así, 24 horas después en su encuentro semanal con medios de comunicación, el Mandatario, dio paso a uno de los puntos más importantes del plan de acción acordado la víspera: tomó la iniciativa de convocar a una mesa de interacción abierta al pueblo con los sindicatos, a fin de dialogar y aclarar en definitiva cualquier duda sobre la recién aprobada Ley de Derechos y Justicia Laboral para los Trabajadores al Servicio del Estado, y salir avante, enfrentando unidos el verdadero obstáculo: el socavón financiero que se ha cernido como amenaza de cara al futuro de las presentes y venideras generaciones, el cual otros crearon en su momento al fragor de la irresponsabilidad, carencia de identidad y lealtad por Nayarit, y que aún más, las secuelas -estratégicamente planificadas- continúan provocado mayores daños y lucro para provecho propio, e inclusive de otras latitudes.

La convocatoria pues, del Gobernador, dirigida al sindicalismo, comporta sin duda una apuesta poderosa, que bien articulada y ejecutada vía los canales adecuados de comunicación, permitirá primero, superar con la verdad y la transparencia todo temor, resquemor y dudas sembrados desde otras esferas, tanto de buena como de mala fe, y en consecuencia asegurará una victoria total para el trabajador, y segundo, que la verdad prevalezca con los que buscan el triunfo de Nayarit: palpar en directo, a la par de una ciudadanía en general atenta al desenvolvimiento de la trama, el final de un capítulo gris en el acontecer político, económico y de gobernanza, para dar paso a la alborada de la reconstrucción, de un Nayarit sincrónico con el sentir ciudadano de una nueva realidad.

La reconstrucción ya comenzó: “una delegación del Banco Mundial -reveló el Titular del Ejecutivo-, acompañada del Gobierno de México, estará analizando la recuperación financiera y económica de Nayarit, que ha resultado ejemplar a nivel nacional”.  Y mientras tanto, la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), por medio de una delicada intervención quirúrgica a su operatividad presupuestal, se beneficiará de la reestructuración de su deuda y adquisición de responsabilidades respectivas. 

Asimismo, se dio a conocer también a los representantes de los medios de comunicación, la continuidad de acciones de prevención en afluentes de la Entidad (dragado y retiro de palizada en ríos Acaponeta y San Pedro) que ante la inminente temporada de lluvias, pueden comportar un riesgo de inundación para las comunidades asentadas en sus inmediaciones.

De igual forma, para concluir, el Gobernador apuntó que “para eliminar la deuda del sector social con la CFE, [se está] trabajando un acuerdo mediante el cual el 50% será cubierto por el gobierno federal, el 30% por el Gobierno del Estado y el 20% por la sociedad”.

Es pues, el actual, un tiempo oportuno para concentrar esfuerzos en el entendimiento de tiempo, circunstancias y posibilidades reales como estrategia mancomunada pueblo-gobierno en aras de erigir el blindaje preciso de frente a los ingentes desafíos del indómito porvenir. Todo ha cambiado, y nada volverá a ser igual, y un elemento imprescindible en la decodificación de las señales del devenir, está en la comunicación. De tal suerte que en el “ejercicio y defensa de la libertad de expresión”, y su respaldo institucional inteligente se encuentra el camino que facilitará diagnósticos fidedignos del sentimiento colectivo y su consecuente evolución. Y tal es el peso de lo anterior, vale decir, que este martes siete de junio, se cumple un aniversario más de la conmemoración del “Día de la Libertad de Expresión”, desde la trinchera de los nobles representantes de los medios de comunicación, toda vez que fuera instituido en 1951 a propuesta de editores de diarios y el entonces Presidente de la República, Miguel Alemán Valdés, como un reconocimiento y estímulo a un tiempo, a la valía irreductible del ejercicio periodístico. En marcha entonces, en comunicación, y enhorabuena.