Contragolpe de la 4T a las mafias nacionales y extranjeras

Duro golpe asesta la 4T a las mafias nacionales e internacionales con la corrección hecha por el tribunal especializado en competencia económica; dicho tribunal corrige la "aberración" de suspender de forma definitiva la Ley de la Industria Eléctrica, al considerar que la Comisión Reguladora de Energía no ha empezado siquiera el proceso administrativo. El tribunal colegiado consideró incorrecta la determinación del corrupto juez Juan Pablo Gómez Fierro, quien suspendió de forma definitiva la aplicación de la Ley de la Industria Eléctrica en el caso de las empresas Hidroeléctrica Cajón de Peña y Energía Verde Meyer, por considerar que creaba un desbalance en la competencia y era necesario darle el beneficio de la suspensión a todos los amparos interpuestos a cambio seguramente de algunos billetes verdes.

 La resolución del segundo tribunal colegiado especializado en competencia económica es un triunfo importante y sienta un precedente de enorme valía porque traza la ruta a la que se ceñirán los fallos en los otros recursos judiciales que están en trámite y que seguramente serán también declarados improcedentes.

 En la sentencia queda claro que no se puede impedir o paralizar el desarrollo de las atribuciones propias del Estado Mexicano como son las responsabilidades de rectoría en materia eléctrica, previstas en el artículo 27 constitucional, que los corruptos jueces habían anulado.

 La Ley de la Industria Eléctrica, que fue propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador y aprobada por el Congreso este año, no tiene ninguna disposición que pueda ser calificada como inconstitucional. Sólo estableció un equilibrio frente a la legislación anterior, la del sexenio de Enrique Peña Nieto, quien dio a las empresas privadas extranjeras todas las ventajas, a tal grado que la CFE terminaba subsidiándolas.

 La ley anterior era un atraco, y con la nueva ley no se pretende desaparecer a las empresas privadas, sólo equilibrar, para que la CFE avance en lugar de desaparecer. De lo que se trata es de impedir que pase lo mismo que ahora ocurre en España, donde las empresas privadas, muchas de las que también operan en México, han creado, con su voracidad, un enorme problema, al aumentar de forma desmesurada las tarifas de electricidad.

 La gran diferencia es que la CFE tiene por objetivo general atender a la sociedad, proporcionarle la energía eléctrica al mejor precio, además de impulsar el desarrollo nacional. Y las empresas privadas extranjeras sólo vienen a obtener los mayores recursos posibles, sin importarles la gente.