Tepic, Nayarit, jueves 25 de abril de 2024

Posiblemente siga habiendo más errores

Sergio Mejía Cano

22 de Diciembre de 2018

Es obvio que errar es humano, y nadie que se considere serlo se podría decir exento de no estar en la disponibilidad de errar. Lo que es extraño es que tanto el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su equipo, gabinete normal y ampliado, así como asesores, etcétera, a sabiendas de que están siendo monitoreados a cada paso que den, estén cometiendo errores que saltan de inmediato a la vista hasta de quien no los monitorea.

A cualquier palabra, escrito o paso que dé AMLO y su grupo de colaboradores, de inmediato sus adversarios, contrincantes y dolidos por su triunfo le buscan los tres pies al gato para tratar de encontrar de dónde agarrarlo y cuestionarlo desde luego; lo malo es que quienes se encargan de esto lo hacen sin esperar más y la mayoría de las veces se van con la finta sin esperar más, por lo que se nota en ocasiones que tergiversan lo dicho o hecho por AMLO y su equipo.

Era obvio que el recorte en el presupuesto a las universidades tendría que armar ámpula de inmediato debido a que AMLO se había comprometido en campaña que no habría tal recorte a dichos planteles educativos; sin embargo, ahora el mismo presidente de México ha reconocido que fue un error, uno más como el del que se dijo que fue error en la transcripción cuando se le hizo ver respecto a que en su nuevo proyecto educativo prácticamente se le estaba anulando la autonomía a las universidades públicas del país. En ambos casos ya reconoció AMLO los errores y que se van a corregir, como por ejemplo en lo referente al recorte a las universidades, se les corregirá el recorte haciéndolos en otras dependencias y programas sociales; y he aquí en donde podría estar saltando la liebre en cuanto a si fueron errores a propósito o simples errores en sí.

¿Qué acaso no habrá sido una estrategia esto del error del recorte presupuestal a las universidades públicas por no poder recortar abiertamente dicho presupuesto de egresos a las dependencias y programas sociales y que ahora, para tapar el hoyo hecho, entonces sí hacerlo? Porque ni modo que tanto AMLO como su grupo no estén al tanto que en las pasadas administraciones los sectores más golpeados de siempre y de toda la vida fueron Educación y Salud, y prácticamente dejados a un lado Ciencia y Tecnología, así como el Arte y la Cultura; por lo que es evidente que esta nueva administración no podía aventarse un clavado a una alberca sin agua siguiendo el mismo parámetro de los pasados sexenios que se cebaron sin miramientos haciendo caer las universidades públicas a tal grado que hoy en día existen más de una decena de las universidades públicas con problemas de liquidez a su planta magisterial y trabajadora que, según algunos analistas, todo para encaminar a las universidades privadas que en los tres pasado sexenios proliferaron como hongos en el país supuestamente para darle lugar a los miles de rechazados que esperaban ingresar a las universidades públicas.

Se supone que AMLO y su equipo tuvieron que tener todo esto en cuenta, por lo que a la mejor se hizo un caldo de cultivo para ver por dónde estaba el mal, ya que se dijo antes de reconocer que fue un error, que el recorte estaba justificado debido a la poca claridad con que han estado manejando los recursos las universidades entre las jerarquías de las mismas con el cuento precisamente de la autonomía, por lo que el recorte era para parar el que hubiese una casta privilegiada dentro de las universidades. Pero ya se reconoció que hubo un error y por lo mismo ahora se le va a ajustar recortándole el presupuesto a otras dependencias que debieron haberles recortado principalmente pero que para no herir susceptibilidades se tuvo que crear un tipo de pantomima.

Ahora bien: se le cuestiona a AMLO que tal vez ese error fue para cumplir su promesa de crear 100 universidades más para que ya no haya rechazados, y que el recorte fue para ello, porque sus adversarios se preguntan constantemente que de dónde va a sacar tanto dinero para cumplir sus promesas de becas y ayudas a adultos mayores y hasta para los llamados ninis; sin embargo, estos detractores no se ponen a pensar en todo el dinero que desapareció con la estafa maestra, lo que se llevaron los ahora exgobernadores y todo el dineral que no aparece por ningún lado. Y posiblemente no es que AMLO se los vaya a quitar, sino que si en la pasada administración salió todo ese dinero de las arcas nacionales, ahí volverán a caer cantidades similares, pero ahora estarán muy vigiladas.

Sea pues. Vale.

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