Tepic, Nayarit, viernes 29 de marzo de 2024

Morgues rebasadas

Sergio Mejía Cano

20 de Septiembre de 2018

En buen papel se ha puesto la imagen no nada más del estado de Jalisco sino del país entero a nivel internacional por la imagen del tráiler cargado de cadáveres que ahora se sabe no nada más es uno, sino dos las cajas refrigeradas que guardan en su interior restos humanos.

Tal vez debido a que el asunto se salió de las manos de las autoridades se supo de esto, porque según se ha informado, ya va para dos años que se ha tenido que hacer uso de estas cajas refrigeradas porque la morgue tapatía ya no tiene cupo para tantos cadáveres, por lo que ha sido necesario buscarles este acomodo mientras llegan familiares para su identificación y ser entregados; sin embargo, he ahí el problema, pues según se ha dicho hay cuerpos que ya llevan ahí meses sin que nadie los reclame.

Continuamente se dan cifras de desaparecidos y que son muchos de acuerdo a las notas informativas y que nada se sabe de las personas que no aparecen por ningún lado, y supuestamente tampoco se encuentran entre los cientos que están en las cajas de tráiler ni en los frigoríficos del Servicio Médico Forense (Semefo) jalisciense.

Se entiende que todos estos muertos que anduvieron paseando en la zona conurbada de Guadalajara tienen nombre y apellido y que estos no brotaron del suelo (como los de las fosas clandestinas) por lo que deben de tener más de un familiar que sufre por su desaparición. Porque se ha documentado y se ha escuchado a personas que dicen que prefieren ver el cadáver de su familiar a estar siempre con la zozobra de estar piense y piense que en dónde estará, ya que una vez sabiendo que está descansando en paz, así ya se hacen a la idea de solamente guardar su recuerdo y así dejar de buscar al familiar con la idea de encontrarlo algún día.

Es posible que no nada más en Guadalajara esté ocurriendo esto, ya que se ha documentado que la mayoría de los Semefo de otras ciudades grandes y pequeñas del país ya no dan abasto para tener tan gran cantidad de cadáveres que al parecer cada día aumentan más y más. Incluso hace tiempo se dio la información que en Acapulco, Guerrero se habían descompuesto los aparatos refrigeradores de las cámaras mortuorias por lo que empezaron a emanar olores fétidos y la gente vecina a estas morgues comenzó a protestar porque ya no aguantaba dichos aromas que llegaron a ser insoportables.

Que no se informe de esto a la opinión pública es una cosa, pero de que exista la posibilidad de que la capacidad de las morgues ha sido superada es un hecho, pues la cantidad de muertos se eleva cada día, y no es que se mueran solos ni por enfermedad ni por vejez, sino que son ayudados a pasar a mejor vida con medios violentos.

Así que en cierta forma es entendible que en Guadalajara las autoridades correspondientes hayan tenido que echar mano de cajas refrigerantes para guardad los cuerpos mientras son reclamados; y tal vez no sea nada más en Guadalajara en donde esté pasando esto, ya que con el aumento de cadáveres también las autoridades de otras ciudades hayan hecho algo similar pero con más precaución y discreción o también por qué no: que muchos cuerpos al no ser identificados hayan sido sepultados en fosas que hoy al descubrirse el pastel se le atañe con el mote de que son clandestinas y que nadie sabe y nadie supo cómo llegaron a aparecer en dichas fosas; porque como en Veracruz, por ejemplo, aunque sea de noche, se requiere algo de tiempo para poder sepultar en una sola fosa cientos de cadáveres y a poco nadie se va a dar cuenta. Se ha dicho con insistencia que los entierran personas que pertenecen a grupos criminales; pero ¿con qué fin? Si se dice que el llamado crimen organizado coopta a los inmigrantes de Centroamérica para que les trabajen sus cultivos, pero ni que fueran pañuelos desechables que una vez usados los maten y los entierren; pero ¿quién sabe?

Y a propósito de los inmigrantes, existe la posibilidad de que muchos de los cuerpos hallados en tantas fosas clandestinas y los que están en las morgues y ahora en las cajas de los tráileres en Guadalajara, pertenezcan a esos inmigrantes que tratan de atravesar nuestro país hacia la frontera norte y que por eso muchos de ellos no han sido identificados plenamente, porque se ha informado que ya tienen sus huellas dactiloscópicas, por lo que de ser así, más de uno ya hubiera sido identificado, pero si son extranjeros, ¿cómo? Y es de suponer que sus familiares podrían ser de escasos recursos, así que para poder venir a identificarlos se les haría muy difícil. Sea pues. Vale.

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