La educación pública en México requiere el neuroaprendizaje como componente central

Las primeras interrogantes son: ¿Quién Aprende?, ¿Qué Aprende?, ¿Para Qué Aprende?, ¿Cómo Aprende?, etc.

No parece que tenga mucho que ver con el Neuroaprendizaje y menos con la Educación Pública en México. Pero reflexionemos al respecto.

Aunque los mexicanos vivamos en sociedad, en primer término, quién aprende es el Individuo. Y lo más trascendente es, que no hay dos individuos iguales, ni siquiera entre los gemelos. Cada individuo es un Universo, es único. Y, para empezar, ya localizamos la primera deficiencia de la pedagogía o didáctica de la Educación Pública en México. Desde luego que tiene su explicación. Grupos masivos de hasta 50 alumnos para un solo docente. En estas condiciones, es imposible que haya una atención personalizada. Entonces, el Estado Mexicano a través de su Secretaría de Educación Pública debe reducir el número de alumnos para cada maestro.

Les cuento mi experiencia. Cuando me fui becado a la Universidad Amistad de los Pueblos, “Patricio Lumumba”, los grupos para cada maestro eran hasta de 9 alumnos. Es más, yo nunca estuve en un grupo de 9 alumnos. El grupo más numeroso en el cual estuve fue de 7 alumnos. El salón era pequeño con una especie de mesa de 50 cm de ancho y en forma de “L”. El docente se sentaba frente a los alumnos en el espacio que dejaba la “L” y atrás de él estaba el pizarrón. Por lo tanto, la atención del docente hacia sus alumnos era obligadamente personalizada. Desde luego que había conferencias donde acudíamos varios grupos. 

¿Qué ocupa el Estado Mexicano? Dejarse de grillas y alejarse de los grillos, así como remodelar los espacios educativos, aumentar el número de docentes, disminuir el número de alumnos por maestros y planear la educación, no para la enseñanza, sino para el aprendizaje, y más específicamente, para el “neuroaprendizaje”.

Y el individuo, ¿Qué Es lo que Aprende? Los individuos lo que aprenden son los “Productos Sociales”. Las Reglas, Las Leyes, Los Pensamientos; Los Conocimientos, Los Instrumentos, Las Técnicas, Los Lenguajes, Las Inteligencias Artificiales, etc., todos ellos son “Productos Sociales”. Y como se ve, existen bastantes “Productos” que Aprender. Pero a la vez, se genera una “Gran Necesidad Social”, tener docentes “Suficientemente Informados” por no decir otra cosa. 

Pero el Individuo también es un Producto Social, no solo por ser producto de la fecundación de un óvulo por un espermatozoide, sino por Aprender lo que la Sociedad Produce e Integrarse a Sociedad y a la Nueva Producción de “Productos Sociales”

Existe una visión provocada por la Inteligencia Artificial sobre el aprendizaje. Este enfoque considera que el Cerebro es el que Aprende. Y de que todo el conocimiento es un asunto de “Cableado Cerebral”. Lo peor del caso es que a “esta visión” la llaman “científica”. Y no puede ser de otra manera porque basan su razonamiento en las “Redes Neuronales IA”, donde IA quiere decir Inteligencia Artificial, y en el modelo de una “Computadora”. 

Evidentemente que el “Aprendizaje” es una actividad integral e integradora del “Individuo Humano”. Individuo que vive y produce en Sociedad. Y que lo que aprende son Productos Sociales producidos antes de su nacimiento. Pero que en cuanto se neurodesarrolle, interiorice los saberes y las experiencias sociales, así como también se vaya integrando a la sociedad, producirá bienes sociales, materiales y / o espirituales para las generaciones futuras.

Pero cómo se relaciona el individuo con la sociedad y cómo aprende. Pues a través de su cuerpo. El individuo tiene en su cuerpo 7 sentidos a través de los cuales se relaciona con su medio o entorno. Estos sentidos son los siguientes: la vista, el tacto, el olfato, el gusto, el oído, el propioceptivo y el vestibular. Se puede decir que los “Sentidos” constituyen el “Sistema Nervioso Periférico” del cuerpo del individuo y que, a través de él, se relaciona con su Medio o Entorno. La estimulación que recibe el “Sistema Nervioso Periférico” va al “Sistema Nervioso Central”. A través del Tallo Cerebral, llega al Tálamo, el cual la manda a la Amígdala para su procesamiento, y una menor cantidad la envía al Hipocampo y a la Corteza Cerebral Específica. La Amígdala una vez que procesó la información, envía sus resultados al Hipocampo y a la Corteza Cerebral Específica, la cual emite la Respuesta al Estímulo Recibido y la dirige al Tallo Cerebral, para que a través del Sistema Nervioso Central llegue dicha respuesta al Sistema Nervioso Periférico. 

En una forma muy general y global, este es ciclo del Estímulo-Respuesta. Pero, además, lo que queda claro y evidente, es que el Individuo Aprende con, y a través de, su Cuerpo, pues el Sistema Nervioso Central y el Sistema Nervioso Periférico, son parte de su cuerpo.

Por otra parte, hay un elemento que se requiere tener en cuenta. Este elemento es la “Obsolescencia”. 

La Obsolescencia impacta tanto en el Conocimiento como en la Tecnología. En un periodo de 2 a 3 años no únicamente se tiene Conocimiento Nuevo sino Conocimiento Masivo. Y en cuanto a la Tecnología, en el mismo periodo surgen Nuevas Tecnologías que suplen a las anteriores. 

Esta situación plantea varios desafíos a la Educación Pública de México. Incorporar el saber científico de la época en la Educación Pública. Orientar los Planes y Programas Educativos al Neuroaprendizaje en lugar de a la Enseñanza. Desarrollar en los educandos las habilidades de la Autogestión Educativa. Generar un Sistema Educativo de Educación Continua presencial y a través de Internet, etc.

Doy gracias a mis 4 lectores.