Seguiremos en lucha hasta lograr justicia social

En la mayoría de foros, que como ponente ha participado, hace saber que nació en la comunidad de Huaynamota, municipio Del Nayar, en el seno de una familia de muy escasos recursos económicos. La prueba está en que salió del vientre materno sobre un petate. Ni siquiera tuvieron la posibilidad de que la criatura naciera en un colchón, porque en 1966 este debería traerse a la sierra cargando la persona, a lomo de bestia o en avión.

Es Manuel Rivera Taizán, actual presidente del Movimiento Indígena Popular en Nayarit, quien expone con su ejemplo la difícil situación por la que han atravesado, al paso del tiempo, los grupos originarios que habitan la región de la sierra nayarita.

Al continuar con su relato, Rivera Taizán considera un hecho sobresaliente que su señor padre haya decidido abandonar la sierra con todo y familia, porque alcanzó a vislumbrar que en Huaynamota no había futuro. “Nos vinimos a Tepic con el interés que yo estudiara”.

Tres largos años tardaron en arribar a la capital nayarita. Para recorrer el trayecto, saliendo de Huaynamota, en un burro cargaron el metate para hacer tortillas y treparon al niño Manuel. También en el camino nació otro varón más en el clan. En la ciudad, el jefe de familia tuvo que aprender la actividad de peón de obra de construcción, luego en la práctica se graduó como albañil de cuchara. Participó en obras como el mercado Juan Escutia, la construcción del edificio de CONASUPO que se ubica por el rumbo de la colonia Dos de Agosto. 

Sus padres fueron Teogracia Taizán Cayetano y Raúl Rivera Nava, quienes procrearon siete hijos. Manuel Rivera Taizán fue presidente municipal Del Nayar en el periodo 2002-2005.

ANHELO POR EDUCARSE

“Yo me dediqué a estudiar, estudiar, estudiar…terminé la carrera de Ingeniero Agrónomo con mucho trabajo”. Posteriormente tuvo la oportunidad de hacer una maestría en Pedagogía en la Normal Superior de Nayarit. El doctorado en Ciencias de la Educación la realizó en el Instituto Pedagógico de Estudios de Postgrado de Celaya, Guanajuato. Fue el primer doctor en Ciencias de la Educación en Nayarit y como tal el primer egresado de la UAN. Está vinculado con organismos de educación en varios países del mundo, y no sólo eso, sino que los ha visitado (Argentina, Uruguay, España, Estados Unidos, Japón, Nigeria, Alemania, Costa Rica, entre otros)

A partir del 2006, Manuel Rivera Taizán es el presidente del Movimiento Indígena Popular en Nayarit, organización que nacionalmente se fundó en el año 2000. El actual presidente de esta es el doctor Enrique Ku Herrera, campechano de origen maya. La organización ostenta su comité ejecutivo nacional, programa de acción, estatutos, reglamento interno y su eslogan es: Con la construcción de nuestro destino.

HAN PERDIDO MIEDO A EXIGIR

Fiel a los principios, Manuel Rivera Taizán sostiene que “mientras no haya justicia social, seguiremos luchando y trabajando. El Movimiento Indígena Popular en Nayarit atiende a las necesidades de los grupos vulnerables, los que menos tienen, los pobres, los habitantes de los pueblos originarios…este tipo de acciones están considerados en nuestros estatutos y plan de trabajo”.

- ¿A qué problemas se ha enfrentado en la sierra de Nayarit?

-En relación al movimiento indígena hemos encauzado algunas luchas. Te lo digo de la siguiente manera: tenemos que ver con todas carencias y necesidades de los grupos vulnerables, desprotegidos.

Hemos realizado una serie de gestorías, tomando en cuenta la inexistencia de organización que hablara por ellos, principalmente los pueblos originarios, sumidos en el rezago social, olvidados. Hemos alzado la voz y los resultados no se han hecho esperar con base en el beneficio del desarrollo de pueblos y comunidades indígenas. Sus habitantes han perdido el miedo a exigir atención en los diferentes niveles de gobierno.

- ¿En este tema se incluye la ejecución de determinadas acciones por parte de los gobiernos estatal y federal?

-El apoyo se ha visto en algunos gobiernos, en otros definitivamente no. Hace falta justicia social, en unos pueblos actualmente no se ha visto ningún desarrollo. En el pasado, en dependencias como INI, CDI, no se distribuía el presupuesto entre los pueblos originarios, muy a pesar que el dinero era muy necesario. En el gobierno de Andrés Manuel López Obrador sí ha llegado el recurso. Ahora los apoyos sociales, autorizados por la presidencia de la república, llegan directamente al beneficiario con su tarjeta bancaria, no hay ningún intermediario. En el pasado eran distintas las dependencias que manejaban los recursos, y no sabían ni a cuál recurrir, o si eran diez pesos nada más llegaban dos.

A la mente de Manuel Rivera Taizán vino otro tema. De inmediato lo describe:

“Históricamente los pueblos indígenas han sido la frontera territorial y geográfica de los estados. Revisa y te darás cuenta de que todos los que viven en los límites territoriales de cada entidad son, prácticamente, puros indígenas. Son ellos los que viven en las montañas y cuidan los territorios de invasiones. Los grupos de indígenas realizaron el primer muro en los límites de México con Estados Unidos, con el firme propósito de evitar el saqueo de nuestros recursos naturales, sobre todo de las minas de oro. Fueron ellos que en grupos se diseminaron en la frontera con el país del norte. Luego vinieron otro tipo de muros, pero ellos fueron los primeros, muchísimo antes que 1994”.

De manera rotunda negó discriminación a grupos étnicos en el interior del Movimiento Indígena Popular en Nayarit. “Porque para el desarrollo de los pueblos originarios, necesariamente debe haber inclusión”.

“Como su nombre lo dice: es movimiento. Lo que se deduce que está en constante dinámica para efecto de atender a los grupos originarios, es decir, de donde provienen de nacimiento. En Nayarit hay coras, huicholes, tepehuanos y mexicaneros. Hemos realizado gestoría ante instancias de gobierno, en unas hemos encontrado eco, en otras, definitivamente no ha habido siguiera oportunidad de que nos reciban. Citaré un ejemplo, cuando un hermano indígena fallecía, el gobierno nos regalaba ataúdes, si era necesario el cuerpo lo llevaban a la sierra, y actualmente no existe nada de eso”.

Más que “grillar”, Manuel Rivera Taizán se define como gente de trabajo. Como presidente del organismo indígena en cuestión, llevó adelante la iniciativa de constituir 23 escuelas telesecundarias en el municipio Del Nayar. Durante el gobierno de Ney González (2005-20110) Manuel fue el creador del proyecto de telebachillerato del Ranchito Del Nayar para llevar allá educación de nivel medio superior. Intervino en la elaboración del plan de lo que inició como Universidad Intercultural de Mesa del Nayar, hoy Universidad Tecnológica. “Son acciones que van hacia el desarrollo, en la formación del individuo, en la formación del ser humano”.

Rivera Taizán concretó con Omar Wicab, rector de la Universidad Autónoma de Nayarit, la admisión de dos indígenas por cada unidad académica, aun cuando reprobaran el examen de admisión. Bastaba con que pertenecieran a un grupo originario para cursar estudios superiores en la UAN. Firmó convenio junto con el rector.